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Los Dreamers se niegan a resignarse y perder el beneficio que les ha permitido tener una vida normal en los Estados Unidos.
El día de hoy han iniciado una serie de protestas, aumentando la presión para que el Congreso apruebe el Dream Act. Piden además a demócratas y republicanos moderados que, en caso de que la ley de presupuesto no incluya una solución, provoquen un cierre del Gobierno.
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Esta presión surge debido a que, si antes del viernes no se llega a un acuerdo con respecto a la ley de gasto, Estados Unidos entraría en un cierre virtual de Gobierno antes de año.
De ser así, no tendría dinero para funcionar o siquiera hacer gastos y los jóvenes soñadores están seguros que con eso lograrán que se tome una decisión sobre su situación.
Juan Escalante, beneficiario de DACA y activista del grupo America’s Voice explicó que “el Gobierno tiene que enfrentar la realidad y darle un camino a los ‘soñadores’ para la regularización de su estatus migratorio".
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Se espera que hasta el miércoles se generen al menos 50 actos de protesta, que han empezado el día de hoy con actos de desobediencia civil, testimonios frente al Capitolio y sentados en las oficinas de legisladores de todo el país.
Dentro del Congreso, el debate también ha sido álgido. Existe un grupo de demócratas de todo el país comprometidos para trabajar en favor de la restauración de la protección de los soñadores, mientras que otro grupo vela por otros intereses.
Por ahora tendremos que esperar el desenlace de las protestas y las discusiones del Congreso en el transcurso de la semana para saber cuál será el futuro de estos jóvenes inmigrantes.
