Tras un debate público intenso iniciado en la tarde del miércoles, el Senado del estado de Florida aprobó el jueves por la noche el polémico proyecto de ley de prohibir los abortos después de que el feto alcance las 15 semanas de gestación.
Permitiendo solo excepciones si lo médicos atestiguan un “riesgo grave” para la persona embarazada o si el feto tiene una “anormalidad feto fatal”, definida como una condición que resultará en la muerte al nacer o inmediatamente después. Pero sin excepciones por violación o incesto.
El proyecto de ley patrocinado por el Partido Republicano fue aprobado en una votación de línea partidaria que terminó 23-15, ya que los representantes republicanos conforman la mayoría del Senada de Florida con 24 escaños, mientras que lo demócratas cuentan con 15 escaños.